Marcos el peluquero camina,
Con tijeras y peine en su mano.
Mas no saben lo que el corazón guarda,
Vida doble su vida liviana.
Día de corte y noche de sombras,
Secretos que lleva en la almohada.
Una sonrisa al cliente fiel brinda,
Pero en sus ojos, tristeza vaga.
Sueña con un amor que no olvida,
De noches oscuras, su alma se apaga.
Cantos de banda en su corazón,
Más su cabeza pesa como plomo,
Cada tijera corta más que pelo,
Corta sueños de un alma en duelo.
En el salón risas se oyen claras,
Pero en su pecho, la pena es disparada.
[Solo de trompetas]
Se despierta en la noche, sudor frío,
Aquel amor perdido es su único abrigo.
Con su charola llena de sueños,
Alza la vista hacia un cielo ajeno.
El peine traza caminos inciertos,
En cada cliente, un rastro de anhelo.
[Puente]
El acordeón llora su pena en secreto,
Las trompetas cantan su triste soneto.